Co-Herencia (Antonovsky)
Tal y como se contempla bajo el rezo de la OMS, la salud es un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solo la ausencia de afecciones y enfermedades (OMS, 1946, 2021). Introduce la dicotomía entre el bienestar y el malestar, introduce la salud como un continuo al que Antonovsky (1993) recurre y justifica su paradigma salutógeno.
Desde el paradigma del modelo, el autor (Rivera, 2011) encuentra puntos comunes con la Teoría General de Sistemas considerando a la persona como sujeto activo en un proceso dinámico de autorregulación para el bienestar. Los axiomas básicos del modelo versan en torno a los recursos generales de resistencia -factores biológicos, materiales y psicosociales que hacen más fácil a las personas percibir su vida como coherente, estructurada y comprensible tales como el dinero, el conocimiento, la experiencia, la autoestima, los hábitos saludables, el compromiso, el apoyo social, el capital cultural, la inteligencia, las tradiciones y la cosmovisión- y el sentido de coherencia, conceptualizado como la capacidad para poder dar uso a los recursos generales disponibles (Lindstrom, 2006 en Rivera, 2011).
Según el autor, el sentido de coherencia estaría compuesto por tres componentes clave (Rivera, 2011; Burguillos, 2014):
la comprensibilidad - componente cognitivo: permite la comprensión sobre la organización percibida de la realidad;
la manejabilidad – componente conductual o instrumental: evaluación secundaria de su capacidad para manejar la realiad identificada;
la significatividad - componente motivacional: percepción de alineación de las acciones hacia las metas de vida.
Sin duda, la revolución de la propuesta de Antonovsky viene dada por el hecho -y confirmación empírica- de que el sentido de coherencia es una forma de afrontamiento (Burguillos, 2014), un mecanismo eficiente y eficaz para lidiar con el malestar psicológico. Y muy probablemente otro de esos procesos aprendidos vicariamente; me aventuraría a considerar que incluso la epigenética añadiría marco justificativo.
Referencias:
- Antonovsky A. (1993) The structure and properties of the sense of coherence scale. SOC. Sci Med.,36; 725–33.
- Burguillos Peña, A. (2014) sentido de coherencia e inteligencia emocional: efecto en la ansiedad social de estudiantes universitarios. Revista de Psicología, 1(4); 295-302.
- Rivera, F.; López, A.; Ramos, P. & Moreno, C. (2011). Propiedades psicométricas de la escala Sentido de coherencia (soc-29) en adolescentes españoles. Journal of Child and Adolescent Psychology,4; 11-39.
- Vega, MC.; Frías, A. y Del Pino, R. (2019) Validez y confiabilidad de la escala de sentido de coherencia en estudiantes de grado de enfermería de una universidad española. Gac. Sanit.,33(4); 310–316
